Esta noche, cuando cierre la tienda a las nueve, comenzarán oficialmente mis vacaciones. Nueve días de no hacer nada, (nada = leer, pasear, nadar, coser, jugar con mis perros, escribir, cocinar, volver a oír discos que hace tiempo que no pongo, ir al cine, disfrutar de la gente que quiero, etc, etc).
Voy a llenarme de energía, y el 24 de agosto estaré de vuelta.
Felices días a los que están de descanso y a los que no.
Siempre he encontrado un enorme placer en reencontrame con las frutas de temporada, después de meses sin poderlas disfrutar. Si bien es cierto que cada vez es más fácil encontrar cualquier fruta en cualquier estación, (fácil, que no ecológico o respetuoso), aún hay algunas a las que sólo se llega cuando se tiene que llegar. Este es el caso de los chumbos. Los chumbos me saben a verano, y me recuerdan el color y el olor de los campos secos bajo el sol canicular.
Los chumbos, también llamados higos chumbos, son el fruto de la chumbera, cuyo nombre científico es Opuntia ficus-indica. La O. ficus-indica es una planta muy interesante, por sus propiedades y usos. Para más información, se puede pinchar aquí. Según las variedades la coloración de los chumbos maduros va desde el verde pálido hasta el burdeos, pasando por el amarillo, el anaranjado y el rosado.
Lo primero para comer chumbos es recolectarlos. Hay que tener cuidado al hacerlo, ya que los frutos están cubiertos de pequeños grupos de espinas diminutas que se clavan en la piel con suma facilidad y resultan muy fastidiosas. (Mientras escribo esto tengo en el cuerpo alguna que otra espina que la experiencia previa recogiendo chumbos no ha evitado que se me claven).Cogerlos con guantes, evitar hacerlo con viento, ya que este arrastra las espinas sueltas, ponerlos en el suelo y barrerlos con manojos de plantas pegajosas, como por ejemplo la altabaca, o con una escobilla de pita o esparto, y lavarlos con agua posteriormente elimina parte de estas molestas espinas.
A continuación hay que pelarlos. Como los procesos anteriores no habrán eliminado todas las espinas, en este paso hay que seguir teniendo cuidado. Un buen método para pelarlos es hacer dos cortes transversales en los extremos del fruto, y uno longitudinal que una los dos anteriores. A continuación se separa la piel y aparece el fruto pelado, que podemos dejar caer en un plato o fuente con cuidado de no tocarlo con las manos o el cuchillo ya que estos contienen espinas.
Personalmente, me gusta enjuagar los frutos para eliminar cualquier espina que se haya colado sin querer. Hecho esto solo resta enfriarlos un poquito y ¡¡a disfrutarlos!!
Propiedades nutricionales:
El chumbo esta compuesto en su mayor parte de agua y un 12% de azúcares. Aporta 65 calorías aproximadamente por cada 100 gramos. Se trata de un fruto rico en vitaminas, destacando la vitamina C, el beta caroteno (vitamina A), la niacina o vitamina B3, la tiamina o B1, la riboflavina o B2 y el ácido ascórbico. Entre los minerales significativos se encuentran el calcio, el potasio y el fósforo.
Aunque simplemente pelados y fresquitos ya son deliciosos, aquí va una receta algo más elaborada para preparar con chumbos.
Sorbete de chumbos:
1 Kg de chumbos pelados 250 g de azúcar ½ vaso de agua 3 claras de huevo el zumo de medio limón
Paso 1: Una vez pelados los higos se pasan por el chino para quitarle bien las semillas, se recoge la pulpa y se mezcla con un almíbar suave y frío hecho con el agua y el azúcar a fuego lento. Se añade el zumo de limón. Paso 2: se mete al congelador y se va dando vueltas de vez en cuando con cuchara de madera hasta que granice. Paso 3: Cuando se vaya a servir se baten las claras apunto de nieve y se mezclan con suavidad con el granizado. Se puede servir con una hojita de menta o hierbabuena.
El verano pasado me dejó un grato descubrimiento: Ajo y sus micropoemas. El hallazgo llegó a mí en forma de cortinillas promocionales de la cadena de televisión La Sexta. Este año, para mi grata sorpresa, La Sexta repite autopromoción con una nueva tanda de micropoemas, ilustrados, como el año pasado, por dibujos de Jean Duprez, con música de Mastretta y leídos por la propia Ajo. Las cortinillas son obra Cocoe, una asociación formada por Gabriel Suchowolski y Jean Duprez dedicada a la creación audiovisual.
¿Y a todo esto…. quién es Ajo?, ¿qué es un micropoema?
Detrás de Ajo está María Josefa Martín de la Hoz: Cantante, (es una de las fundadoras del grupo Mil dolores pequeños), poeta, agitadora y personaje de referencia de la cultura underground de Madrid. Desde 2001 es codirectora del festival de música experimental Experimentaclub y del festival de poesía Yuxtaposiciones, ambos con sede en La Casa Encendida de Madrid. También ha realizado desde entonces sesiones como dj en varios clubs de Madrid. Ha colaborado, leyendo sus micropoemas, en programas de radio tales como Música Es Tres de Radio 3, o En días como hoy de RNE1.
En los últimos años se ha centrado en su actividad poética, tanto en sus colaboraciones con Mastretta, con quien presenta el espectaculo Striptease Cardiovascular, como en sus colaboraciones en radio y televisión.
A su trabajo poético Ajo lo denomina micropoesía y, como indica la nomenclatura, sus poemas son breves, punzantes y llenos de ironía y sarcasmo, pero también de humor y ternura.
Ajo publicó su primer libro Micropoemas en la Editorial Luz Roja en el año 2004 y su segundo libro, Micropoemas 2 en Arrebato Libros en 2007.
Yo conseguí los dos a través de Arrebato Libros, que tuvieron la amabilidad de enviármelos contra reembolso, ya que en Málaga era imposible conseguirlos.
Hecha la presentación, creo que lo mejor para entender que es un micropoema, y para empezar a disfrutarlos es verlos y leerlos. Señoras y señores, con todos ustedes, los micropoemas de Ajo:
Para quien ya se sienta cautivado y necesite más y más dosis de micropoesía, o para los que quieran algún dato extra, aquí van algunos enlaces interesantes:
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Esta noche, cuando cierre la tienda a las nueve, comenzarán oficialmente mis vacaciones. Nueve días de no hacer nada, (nada = leer, pasear, nadar, coser, jugar con mis perros, escribir, cocinar, volver a oír discos que hace tiempo que no pongo, ir al cine, disfrutar de la gente que quiero, etc, etc).
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